Cada revista, publicación, programa de entrevistas y comercial hacen
alguna referencia a un tipo de dieta que cuenta con resultados
asombrosos en un corto período de tiempo. Dos dietas comunes son las
dietas bajas en grasas y dieta sin grasa.
Estas dietas cortan la
mayor parte o toda grasa de nuestra dieta diaria. Cuán ciertas son las
afirmaciones que pregonan estas dietas, y que tan seguro es para tu
salud?
Las dietas bajas en grasas: Todas las grasas son malas para ti
Realidad:
Las grasas trans y grasas saturadas sin duda son malas para ti, pero
hay grasas que son realmente buenas para ti y vital para tu salud. La
grasa saturada es la grasa trans, grasas hidrogenadas y se encuentran en
productos de origen animal, margarinas, manteca de cerdo, mantequilla,
por supuesto, estas son las grasas que debes evitar si quieres perder peso, y en general para que tengas una buena salud.
Las
grasas buenas para ti son las grasas no saturadas estás incluyen grasas
monoinsaturadas y poliinsaturadas. Estas grasas las encuentras en el
aceite de oliva, el aguacate y las almendras. Las grasas omega-3 se
encuentran en el pescado azul, aceite de semilla de lino y el cáñamo.
Mito: La grasa no tiene una finalidad nutricional en tu dieta
Hecho:
Las grasas no saturadas realmente juegan un papel importante en las
dietas bajas en grasas. Las grasas no saturadas, también conocidos como
ácidos grasos esenciales, son necesarias para que el cuerpo transporte
las vitaminas solubles en el cuerpo. Estas grasas también son
beneficiosas para tu metabolismo, ya que son fuentes constantes de
energía para el cuerpo.
Mito: Las dietas bajas en grasa reducen los riesgos de tener cáncer y enfermedades cardiovasculares
Hecho:
En un estudio publicado en el Journal of the American Medical
Association, los investigadores comprobarón que no hubo un cambio
significativo en el riesgo de estas enfermedades cuando se sigue las
dietas bajsa en grasas.
El estudio se hizo con dos grupos de
mujeres, un grupo se sometió a una dieta baja en grasas, mientras que la
otra a sus dietas regulares durante un período de 8 a 1 año. El estudio
encontró que no hubo una reducción significativa de las enfermedades
cardiovasculares, y sólo ligeros cambios en los factores de riesgo.
Mito: Debes seguir una dieta baja en grasas para perder peso
Realidad:
Mientras que no consumas grandes cantidades de grasa sin importar si
estás tratando de perder peso o no, y nuevamente te reitero, hay algunas
grasas necesarias en una dieta.
Otro estudio que se hizo con dos
grupos de mujeres y fueron publicados en el Journal of the American
Medical Association, mostró que las mujeres que siguieron las dietas
bajas en grasas perdieron sólo cantidades modestas de peso, en alrededor
de 4 a 8 libras en un año. En la mayoría de los casos, el peso se
recuperó después del primer año.
Entonces qué hacer
Con
tantas fuentes que nos dicen cómo comer y qué comer, cual es el consejo
debemos seguir? Muchas dietas prometen resultados con el fin de ganar
dinero, así que recuerdalo a la hora de elegir una dieta. En general,
cualquier dieta que te aconseja muy poco o nada (de cualquier alimento)
debes evitarlas.
Nuestro cuerpo necesita una gran variedad de
alimentos todos los días, por lo que morirte de hambre por no comer los
alimentos importantes en realidad puede tener efectos dañinos. Asegúrate
de que tu dieta baja en grasas
te permita tener la oportunidad de comer de todos los grupos de
alimentos todos los días y debes hacer ejercicio al menos tres veces a
la semana.
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